La Madre del Río
Existen muchas versiones de la imagen asociada a la Madre del Río. La versión más popular es la de una bella joven rubia y de ojos azules que puede ser encontrada cerca de los ríos.
Su espíritu corresponde al de una española que se enamoró y tuvo un hijo con un indígena. Ambos fueron asesinados frente a sus ojos por estar prohibido ese amor.
La mujer desesperada se arrojó al río también y desde entonces a su ánima le gusta atraer a los niños con su voz. Éstos incautos y embelesados con su voz se tiran al río inadvertidos buscándola.

Las Brujas de Burgama
Cerca de lo que hoy es Ocaña, vivían cinco mujeres llamadas: Leonelda Hernandez, María Antonia Mandona, María Pérez, María de Mora y María del Carmen. Estas se dedicaban a la brujería y eran queridas por los indígenas búrburas de la zona.
Las autoridades eclesiásticas decidieron ahorcar a Hernandez, la más bella de las cinco, pero los indios se rebelaron y la lograron salvar. La bruja colgó al capitán español y acuchilló a sus soldados. El cerro donde sucedió esta historia es conocido hoy como el Cerro de la Horca.

La llorona
La llorona es un mito muy popular no sólo en Colombia sino en toda Latinoamérica, desde México hasta Chile. Los campesinos la describen como una mujer con un rostro huesudo, greñas largas, vestiduras sucias y cargando a un niño muerto en sus brazos.
Se caracteriza por un lamento largo y desgarrador, acompañado a veces de gritos escalofriantes. Este espíritu corresponde al de una mujer que asesinó a su propio hijo y ahora anda condenada a lamentarse por la eternidad. Puede ser encontrada en las riberas de los ríos y entre los cafetales.

El duende
Los duendes en esta región son seres que usan un gran sombrero. Son usualmente ligados con la naturaleza y protegen al bosque y sus criaturas para que no se les haga daño.
Les gusta anudar las crines de los caballos hasta que nadie sea capaz de desenredarlos. Para ahuyentarlos se coloca un tiple nuevo en una esquina de la casa para que éste lo use y no vuelva jamás.

el unicornio
Se dice que los unicornios vivían en la India, ellos tenían cuerpo de caballo, barba de chivo, sus patas de antílope y un cuerno en sus frentes, además de ser de color blanco. Estos seres no podían ser visualizados ante cualquier persona, sino que las personas tenían que ser bondadosas y puras de corazón pero siempre que sean jóvenes doncellas. Se dejaban ver por aquellos jóvenes que podían cuidarlas y protegerlas, pero los malos empezaron a usar a las doncellas para capturarlos.

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